Thank You for Your Ongoing Generosity | Gracias por su continua generosidad

January 26

Dear Families and Friends of St. Francis Xavier Parish,

“He taught in their synagogues and was praised by all.” The scriptures are not shy about addressing how the people of God are to use their resources. Many of Jesus’ teachings are directed at the use of our treasures for the greatest spiritual good.

The scriptural image of the Church is a people that generously provides for the assembly’s needs in their personal response of gratitude for all that God has given them. This applies to providing for both our diocesan church as well as our parish church. I was in a recent conversation about how many more people our parish would need to hire to cover all the benefits we receive from the diocese—human resources, tax services, insurance, legal compliance, school administration, religious vocations and formation, canon law, marriage preparation, and other functions that the parishes share through the diocesan offices. 

To provide for this, and for the ministries done on a diocesan-wide scale, each parish is assessed a proportional contribution to the overall cost. This is the Diocesan Annual Campaign (DAC). The goal for each parish is a function of each parish’s size and income (collections and other contributions). It is about 10-14% of each parish income. If a parish contributes more than its goal, it receives a refund back that is not part of the ordinary income, so it’s a big advantage. This past year our goal was $148,868, which we met and exceeded by over $2,000, more than twice our refund from last year.

Our goal this year, from this February through next January, is $163,755. It might be a bit more of a challenge to meet our goal this year, with much of our focus rightly being aimed at the Bishop’s debt relief program providing 100% matching for our property debt. But I’m confident in our parish generosity that we will still exceed our DAC goal again, as well as our ordinary collections for our operational expenses. I cannot thank you all enough for giving what you can in support of our parish, school, and diocese, and your prayerful response to how God has provided you with his abundant blessings.

God bless you and your families,
Fr. Kelley

Español

Estimadas familias y amigos de la parroquia de San Francisco Javier:

“…a cambio, has guardado el buen vino hasta ahora”. Las Escrituras no son tímidas a la hora de abordar cómo el pueblo de Dios debe utilizar sus recursos financieros. Muchas de las enseñanzas de Jesús están dirigidas a cómo utilizar nuestros tesoros para el mayor bien espiritual.

La imagen bíblica de la Iglesia es la de un pueblo que provee generosamente para las necesidades materiales de la asamblea en respuesta al don de Dios del mejor vino, en todo lo que Él nos ha dado en Su amor superabundante por nosotros. Esto se aplica tanto a nuestra iglesia local de Harrisburg (la diócesis), como a nuestra parroquia local de Gettysburg. Estuve en una conversación reciente sobre cuántas personas más (muchas) necesitaría contratar nuestra parroquia para cubrir todo lo que la parroquia recibe de la diócesis: recursos humanos, servicios fiscales, seguros de propiedad y responsabilidad civil, cumplimiento legal, administración escolar, vocaciones y formación sacerdotal, derecho canónico, preparación para el matrimonio y muchas otras funciones que las parroquias comparten a través de las oficinas diocesanas.

Para cubrir esta necesidad y el ministerio que se realiza a escala diocesana, a cada parroquia se le aplica una contribución proporcional al costo total. Esta es la Campaña Anual Diocesana (DAC). La meta para cada parroquia se calcula en función del tamaño y los ingresos de cada parroquia (colectas y otras contribuciones). Es aproximadamente el 10-14% de los ingresos de cada parroquia. Si una parroquia contribuye más de su meta, recibe un reembolso que no forma parte de los ingresos ordinarios, por lo que es una gran ventaja. El año pasado nuestra meta fue de $148,868, que cumplimos y superamos en más de $2,000.

Nuestra meta para el próximo año, desde febrero hasta enero próximo, es de $163,755. Puede ser un poco más difícil alcanzar nuestra meta este año, ya que gran parte de nuestro enfoque se dirige, con razón, al programa de alivio de la deuda del Obispo, que proporciona una contribución equivalente al 100% de nuestra deuda inmobiliaria. Confío en la generosidad de nuestra parroquia y en que volveremos a superar nuestra meta de DAC, así como nuestras colectas ordinarias para nuestros gastos operativos. No puedo agradecerles lo suficiente por dar lo que pueden en apoyo de nuestra parroquia, escuela y diócesis, y por su respuesta devota a cómo Dios les ha provisto con el rico y divino vino de sus abundantes bendiciones

Que Dios los bendiga a ustedes y a sus familias,

Padre Kelley